La exfiscal Anticorrupción Cecilia Goyeneche salió al cruce de la denuncia mediática realizada por el exgobernador Sergio Urribarri, a través de su abogado, Fernando Burlando, en la que acusan a la funcionaria judicial por supuesta “coacción agravada e incumplimiento de los deberes de funcionario público”

Burlando, señaló apuntó contra la exfiscal por presunto “abuso de autoridad”, en el marco de la causa que investiga a Urribarri junto al empresario paraguayo, Diego Armando Cardona Herreros.

En declaraciones al programa A quien corresponda (Radio Plaza), Goyeneche consideró que "es bastante desopilante toda la situación” y explicó: “Se trata de una entrevista que realizamos a una eventual testigo en el juicio, secretaria de la empresa de Cardona Herrero. Es una entrevista que se tomó en 2019 y esta gente, en este intento que están haciendo de interferir y desviar la atención y evitar con mañas la posibilidad de que la sentencia de Urribarri quede firme,  han generado una denuncia por coacciones aparentemente: un verdadero absurdo".

La exprocuradora Adjunta calificó la denuncia presnetada por Burlando como “un disparate mayúsculo” y sostuvo que la entrevista aludida se dio en referencia a “una enorme cantidad de pruebas” que se encontraron en la empresa de Cardona Herrero, que se llamaba Relevamientos Ancestrales, sobre cómo este empresario llevaba una contabilidad paralela para Urribarri y su grupo familiar.

Goyeneche se refirió a la formalidad habitual de las testimoniales en la que se advierte a los testigos que tienen que decir la verdad porque de lo contrario puede cometer el delito de falso testimonio. "Es más o menos como convertir eso en una amenaza, en una coacción", señaló.

En ese marco recordó que la declaración de la exsecretaria fue “muy explícita y contó todo el ir y venir de estas personas, funcionarios de la provincia Entre Ríos, que llevaban dinero a Buenos Aires”.

“Uno de los problemas de la corrupción es que la plata que entra en el patrimonio del funcionario corrupto entra en negro, entonces hay que gastarla, y para gastarla una persona muy expuesta es difícil tiene que hacerlo también en negro, todo en efectivo y sin que se registre absolutamente nada, y una de las formas que habían encontrado de hacer esto es a través de este empresario que hacía los gastos a nombre de Urribarri”, detalló Goyeneche.

Dos  causas diferentes

Sin embargo, más allá del rechazo a la acusación puntual que se le hace en relación con la entrevista, Goyeneche advirtió que Urribarri y su defensa “están tratando de utilizar estos datos que son de otro proceso para embarrar la cancha en un intento inescrupuloso de modificar una situación extraprocesalmente porque procesalmente no tienen mucha vuelta que darle”.

En efecto, Burlando es abogado defensor de Urribarri en una causa por la que ya tiene condena (8 años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos) por el delito de corrupción y buscan evitar que quede firme, mientras que la entrevista mencionada se dio en el marco de otra investigación por enriquecimiento ilícito.

“No tienen absolutamente nada que ver. Estas entrevistas fueron tomadas en relación con la causa del enriquecimiento ilícito de Urribarri, no tienen nada que ver con el con la con la causa por la que Urribarri fue condenado”, sentenció.

Dos alternativas: “Defensa legal” o “embarrar la cancha”

La fiscal consideró que “cuando una persona tiene problemas judiciales tiene dos alternativas, contratan servicios jurídicos de calidad que lleva adelante una defensa jurídica y defiende su posición dentro del proceso en forma leal”.

Por otro lado, dijo, la otra alternativa es “contratar el servicio de la falta de escrúpulos, que seguramente es muy caro y lo que lo que pretende hacer ese servicio e impedir (la condena o el cumplimiento de la pena) extraprocesalmente, no a través de una demostración de la inocencia, sino a través de otro tipo de artimañas”.

“Están haciendo buscando la forma de generar denuncias y operaciones mediáticas, sobre todo operaciones mediáticas, desviar la atención, tratar de generar la sensación de que nadie está en condiciones de juzgar, que todo es sucio, la intención es incidir sobre los magistrados y los fiscales, apretar o intimidar a la gente que tiene que resolver”, manifestó.

Escuchá la entrevista completa: