Luego de meses de incertidumbre en un escenario electoral tan complejo como inédito en estas cuatro décadas de democracia, las PASO dejaron un panorama más claro acerca de la voluntad popular frente a quienes pelean por el poder.
En Entre Ríos, el oficialismo logró achicar la brecha que había dejado la derrota histórica de los comicios nacionales de 2019 en la provincia respecto del principal candidato de la oposición, Rogelio Frigerio. El intendente de Paraná, Adán Bahl, superó levemente al exministro del Interior de la Nación, y valoró que hace dos meses su cara era prácticamente desconocida en la provincia.
El rival de Frigerio en la interna de Juntos por Entre Ríos, Pedro Galimberti, obtuvo más de 50.000 votos. Es la cantidad de sufragios que el peronismo buscará sumar durante los próximos 60 días para las elecciones generales de octubre, para tener esperanzas de mantenerse en el Gobierno, como hace dos décadas.
Asimismo, la gran elección del precandidato a presidente Javier Milei en Entre Ríos llevó al ahora candidato a gobernador por La Libertad Avanza, Sebastián Etchevehere, a obtener unos 100.000 votos.
El sitio oficial de recuento de votos de la provincia arroja porcentajes sólo dentro de los frentes, no así de cada frente respecto del total de sufragios. Por ello, haciendo un cálculo al momento de estar escrutadas el 86% de las mesas, Adán Bahl recibió el 33% de los votos válidos, 32,6% obtuvo Frigerio, Galimberti sacó el 7,3%, por lo que la Alianza Juntos por Entre Ríos suma casi el 40% de los sufragios. Etchevehere, por su parte, sacaba el 12,6%.
Dos fuerzas políticas quedaron afuera de la carrera electoral para las elecciones generales de octubre. Nueva Izquierda, que llevaba como precandidata a gobernadora a Sofía Cáceres Sforza (única mujer aspirante al cargo) y Confederación Vecinalista Entre Ríos, encabezada por Pedro Olivetti, no superaron el 1,5% de los votos necesarios para pasar a la siguiente etapa electoral.