El abusador sexual que había sido declarado culpable por un jurado popular de Colón, ahora recibió la pena de 22 años de cárcel por ultrajar a sus hijastras menores de edad y a su esposa.

Así lo resolvió la jueza Melisa Ríos, quien informó la sentencia cuya pena se acerca mucho más a los 25 años que había solicitado el fiscal Sebastián Blanc, que a los 10 años con domiciliaria que habían solicitado los defensores Lucio Graglia y Aníbal Martínez.

Los delitos por los cuales el hombre de 46 años fue declarado culpable son “Abuso sexual gravemente ultrajante doblemente agravado por la condición de encargado de la guarda del autor y haber sido cometido contra una menor de dieciocho años aprovechando la convivencia preexistente en concurso ideal con promoción de la corrupción de menores agravada por la condición de encargado de la guarda de su autor en perjuicio de BNB y FNC, en concurso real con Abuso sexual con acceso carnal reiterado”, informó el sitio 03442.

Además, la jueza ordenó se realice la extracción del patrón genético del condenado y su posterior inclusión en el Registro Provincial de Datos Genéticos dependiente del Servicio de Genética Forense del Superior Tribunal de Justicia de la Provincia de Entre Ríos.

Otro juicio por jurados a un abusador

En la ciudad de Concepción del Uruguay se desarrolla otro juicio por jurados por delitos contra la integridad sexual. Se trata de un hombre y una mujer imputados por Abuso sexual agravado. El debate se lleva adelante ante el juez técnico Rubén Chaia, desde la mañana de este martes.

Pedro Adellín Llano y Griselda María Marsiglia son juzgados por 12 ciudadanos y ciudadanas de La Histórica sorteados y seleccionados para resolver acerca de la existencia de los graves hechos denunciados así como sobre la culpabilidad o no de ambos.

El Ministerio Público Fiscal es representado por el fiscal Fernando Lombardi y la fiscal María José Labalta, en tanto que los abogados José Ostolaza y Pablo Sotelo asisten al imputado Llano, y la defensa de Marsiglia la ejercerán el abogado Eduardo Sánchez y la abogada Malvina Aramayo.